El juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, dispuso este miércoles la detención de diez personas directamente vinculadas a la gestión de los laboratorios HLB Pharma y Ramallo, en el marco de la causa que investiga la distribución de fentanilo contaminado asociado a decenas de fallecimientos.
Entre los imputados que ya se encuentran tras las rejas figura el empresario Ariel García Furfaro, fundador del grupo, junto a sus hermanos Hernán y Diego, y su madre, Nilda García Furfaro. La mujer, quien se había presentado ante la Justicia a inicios de julio para denunciar una “campaña de desprestigio”, ejerció como presidenta y vicepresidenta de HLB Pharma.
La lista de detenidos se completa con los máximos responsables técnicos y operativos de ambas compañías. Fue arrestado Javier Tchukran, director general de HLB y Ramallo, identificado como el hombre de confianza de García Furfaro a cargo de la producción. Tchukran, farmacéutico egresado de la UBA, se había incorporado a la empresa el año pasado.
También fueron aprehendidos los directores técnicos de las plantas: José Antonio Maiorano (de HLB en San Isidro), y el dúo a cargo de Ramallo, Carolina Ansaldi y Víctor Boccaccio. Completan la nómina el presidente de Laboratorios Ramallo, Horacio Tallarico, y su director suplente, Rodolfo Labrusciano. Según fuentes del sector citadas en la investigación, estos dos últimos habrían “prestado su nombre” sin participar activamente en la operatoria.
La investigación judicial revela una estructura familiar y corporativa donde los puestos clave de las empresas farmacéuticas, así como de las droguerías Alfarma y Glamamed –canales de venta de sus productos–, estaban en manos de los García Furfaro y sus allegados de confianza.
